Table Of ContentReligión, sociedad, crisis Titulo
Robles Robles, J. Amando - Autor/a; Soler Mata, Eric - Autor/a; Autor(es)
San José Lugar
FLACSO, Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, sede Costa Rica Editorial/Editor
2001 Fecha
Cuaderno de ciencias sociales no. 122 Colección
Crisis; Sociedad; Religión; Cultura; Temas
Libro Tipo de documento
http://bibliotecavirtual.clacso.org.ar/Costa_Rica/flacso-cr/20120815034255/cua122.pdf URL
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CUADERNO DE CIENCIAS SOCIALES 122
R , ,
ELIGIÓN SOCIEDAD CRISIS
ERI C SOL E R A MATA
J. AMA N D O ROB L E S ROB L E S
Sede Académica, Costa Rica.
Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO)
Secretario General: Wilfredo Lozano
Director Sede Académica
Costa Rica: Carlos Sojo
Producción Editorial: Leonardo Villegas
ESTA PUBLICACIÓN SE HACE CON
LACOLABORACIÓN FINANCIERADE
SWEDISH INTERNATIONALDEVELOPMENT
COOPERATION AGENCY(SIDA)
Las opiniones expresadas en este trabajo son de exclusiva responsabilidad
del autor y pueden no coincidir con las de la institución.
© Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO)
Sede Académica Costa Rica
Apartado 11747-1000, San José, Costa Rica
Primera edición: diciembre 2001
ÍNDICE
Presentación .............................................................................................................5
LATENSIÓNUNIDAD/DIVERSIDADCOMOEJECONSTITUTIVOBÁSICO
DELFENÓMENO RELIGIOSOECLESIAL
1. Introducción.......................................................................................................7
2. Aproximaciones básicas..................................................................................10
2.1 Religión y construcción de sentido........................................................10
3. Campo religioso..............................................................................................14
4. Campo religioso y conflicto religioso.............................................................18
5. Producción transaccional.................................................................................23
6. Poder religioso.................................................................................................27
7. La Iglesia.........................................................................................................30
8. Amodo de epílogo.
Algunas precisiones para comprender
el sistema organizativo de la Iglesia Católica.................................................35
Bibliografía.............................................................................................................40
LARELIGIÓNENCRISIS
1. Crisis y duelo como fuentes de novedad........................................................41
2. La religión que debe surgir.............................................................................44
3. Cosas que hacen crisis.....................................................................................49
4. Más cosas que hacen crisis.............................................................................53
5. Algunas explicaciones de la crisis..................................................................55
6. Una transformación mucho más profunda......................................................67
Bibliografía citada..................................................................................................82
PRESENTACIÓN
La formación de la cultura no está disociada de las imágenes y los sentidos que
aporta la religiosidad y que se reconstruye conflictivamente en sus ámbitos
institucionales. Independientemente de preferencias individuales, o incluso estatales
como aparece registrado en la norma constitucional en Costa Rica, la cuestión de la
construcción de sentidos desde lo religioso es central para la comprensión de la
cultura política, de los vínculos entre la vida cotidiana en el nivel íntimo y personal
con los procesos más complejos de organización de la opinión a escala más amplia.
La política y la religiosidad aparecen estrechamente entrelazadas como ha quedado
de manifiesto con los vínculos justicialistas a favor de los desposeídos y con los
movimientos sectarios de ánimo conservador que desde uno u otro lado han tomado
partido sobre asuntos lejanos del púlpito y las escrituras. En tiempos de cambio
social, la demanda de transformación ha tocado todos los órdenes de la vida social y
todos los ámbitos de producción de sentido.
Los trabajos que presentamos en este número de los Cuadernos ilustran esa
problemática. En su trabajo sobre la constitución del fenómeno religioso, Eric Solera,
sociólogo, recoge los fundamentos de la sociología de la religión a partir de las
nociones de campo religioso y producción transaccional de Pierre Bourdieu. El
trabajo del sacerdote jesuita Amando Robles, teólogo, circula alrededor del vínculo
crisis y religión proponiendo “elaborar un duelo” debido a la ruptura de valores y
seguridades del sistema de creencias que organizó la manera tradicional de ser y de
funcionar la religión.
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LA TENSIÓN UNIDAD/DIVERSIDAD COMO
EJE CONSTITUTIVO BÁSICO
DE L FENÓMENO RELIGIOSO ECLESIAL
ERI C SOL E R A MATA
Si el ref e r ente directo rev e r enciado en las acti-tudes rel i g i o s a s
—sea Dios o los dioses, lo sagrado o el misterio, el absoluto o
lo sobre- n a t u r a l — es objeto solo de creencia, increencia o
agnosticismo, pero no de ciencia, las posi-ciones mismas
religiosas constituyen en cambio hechos humanos y sociales,
objeto posible de un discurso científico.
(Alfredo Fierro,So b r e la Religión)
1. In t r od u c c i ó n
Con frecuencia, el fenómeno religioso nos sorprende. Cuando más lo sentimos
latente en los intersticios de la modernidad, explosiona como un arrebato histórico
renovado y nos pone a figurarnos nuevas preguntas; académicas algunas, existenciales
las más. El albor del siglo XXI nos aborda con el imperativo de repensar aquellas tesis
(portadoras de un añejo olor decimonónico) que visualizaban la secularización como
un proceso lineal y progresivo, que indefectiblemente suponía la desaparición del
fenómeno religioso o, cuando menos, su reclusión en esferas constreñidas del
comportamiento de reducidos grupos o sectores sociales. Si de alguna manera ha de
pensarse hoy el fenómeno de la secularización, es en su compleja y dialéctica relación
con las viejas y nuevas formas de vivencia de lo religioso, que siguen incidiendo
diferenciadamente en las formas de sentir, pensar y existir de las sociedades humanas.
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Por el contrario, hoy renueva su fuerza la premisa epistemológica presente en la
elaboración de algunos clásicos de la sociología, según la cual el estudio de la religión
es una vía de entrada privilegiada (aunque no siempre directa) para el conocimiento y
comprensión de muchos fenómenos que afectan a la sociedad en su conjunto, aun de
aquellos cuyo sustrato no es específicamente religioso.
En América Latina la premisa señalada adquiere especial validez debido al lugar
fundamental y a las importantes funciones sociales y culturales que históricamente ha
tenido la religión en estos contextos. Remitiéndonos a la realidad que se configura a
partir de la conquista ibérica, el cristianismo como religión dominante (aunque no
aséptica ante los influjos de las religiosidades indígenas y afro) ha sido estructurado en
la experiencia individual y colectiva a través de la institucionalidad de la Iglesia
Católica, principalmente1, y por esta vía ha impactado de modos y grados diversos los
procesos históricos de las diferentes formaciones sociales latinoamericanas.
El parágrafo anterior nos da el pretexto para precisar cuáles son los énfasis y alcances
de nuestra reflexión teórica sobre lo religioso. En primer lugar, aclaramos que la
elaboración teórica a la que acudimos no se pretende como un modelo explicativo general
de toda forma religiosa del pasado y del presente. En efecto, al tener un importante
referente en Web e r , nuestra propuesta tiene valor explicativo sobre todo para aquellas
expresiones religiosas que fueron de especial interés para dicho clásico del pensamiento
sociológico; es decir, apunta fundamentalmente a las religiones universales: aquellas que
lograron un grado importante de racionalización y de institucionalización de lo sagrado,
en el contexto general de las sociedades agrarias y artesanales (posteriormente en las
industriales) y con el desarrollo de las ciudades. Debe recordarse inclusive que Weber no
reconocía como religiones y clasificaba bajo la categoría de “magia” aquellas formas de
relación con la trascendencia que no reunían tales características.
Así, pues, el enfoque que nos sirve de base no tiene la pretensión de agotar en su
potencial explicativo todas las formas y expresiones de lo religioso, tal como se dieron
en otras épocas de la humanidad, como permanecen en formaciones sociales no
capitalistas o como se están decantando hoy en el occidente moderno.
Dos niveles más de precisión han quedado sugeridos de antemano: la religión
universal que centra nuestro análisis es el cristianismo, de extraordinaria presencia
1 Valga decir que esta ponderación histórica de la Iglesia Católica en América Latina no pretende
desconocer el ascenso, a veces vertiginoso, que están mostrando otras iglesias y movimientos
cristianos en el subcontinente, en especial aquellos que muestran un influjo de tipo pentecostal.
Este, ciertamente, no es tema central de nuestro abordaje.
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histórica en la configuración sociocultural de Occidente; y dentro de ella, la no menos
relevante gravitación de la Iglesia Católica, cuyo modelo de institucionalización de la
experiencia religiosa cristiana ha sido dominante desde su consolidación, en el siglo
IV de nuestra era.
En términos más específicos, el núcleo de nuestras preocupaciones se mueve en
torno al problema del desarrollo institucional de la Iglesia Católica, visto desde el eje
clave de la tensión entre unidad y diversidad. Para ello, partimos de la premisa que dice
sobre la heterogeneidad que es distintiva del fenómeno eclesial-católico en toda la
extensión de su complejo entramado, pese a los evidentes elementos comunes que dan
consistencia a la unidad institucional básica de dicha iglesia.
Aeste respecto, vemos con preocupación como de manera frecuente se habla sin
más de la Iglesia Católica, con lo que se hace una abstracción apresurada y
reduccionista de la mencionada heterogeneidad, siendo más bien este, a nuestro juicio,
un aspecto que resulta insoslayable para comprender su desarrollo institucional, en
cuanto tal, y su interacción con el contexto societal general. De igual modo, también
es frecuente encontrar un tipo de abordaje que pone su afán en dar cuenta de las
funciones políticas o sociales de la Iglesia Católica (en medio de ello, con énfasis
comprensible en el tema de la relación Iglesia-Estado), pero que descuida un análisis
más profundo de la realidad institucional de la Iglesia propiamente dicha2.
En síntesis, el abordaje que a continuación proponemos contempla los siguientes
elementos básicos:
Un marco general de referencia que remite, en última instancia, a los principales
elementos de análisis de lo religioso en la obra de Web e r , pero que tiene su articulación
particular desde la perspectiva bourdiana de los campos de objetividad, como
propuesta conceptual para comprender las diferentes esferas de construcción y
estructuración societal.
En el plano de la sociología de la religión, esta perspectiva pone en su centro la
noción básica de campo religioso, con sus categorías respectivas: interés y demanda
religiosa, producción religiosa, capital religioso, conflicto religioso. Aquí toma gran
2 Por último, pero no menos importante como precisión necesaria, aclaramos que lo que aquí
se presenta es una versión que para efectos de esta publicación, el autor hizo del capítulo
teórico de su tesis: D e s a rrollo Institucional de la Iglesia Católica en Costa Rica: El caso
del Vicariato Apostólico de Limón, 1980-1994.Dicho documento fue expuesto y aprobado
por la comisión examinadora de la Maestría Centroamericana en Sociología, en setiembre
de 2000.
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relevancia por sus alcances explicativos la categoría de pr oducción transaccional,
elemento clave para abordar el eje de tensión unidad/diversidad ya aludido.
Con el concurso de diversos autores, se incorporan también otros conceptos y
categorías fundamentales (v. gr. Iglesia, poder religioso) que completan el cuadro
conceptual que ahora presentamos.
2. Aproximaciones básicas
2.1 Religión y construcción de sentido
En cuanto ser social y cultural, el ser humano requiere de un sentido del mundo y
de la vida, que le permita ubicarse, ordenar, interpretar y moverse dentro de ese
mundo. Ese sentido se construye en la relación históricamente dada del ser humano
con la naturaleza y con los demás seres humanos. Los saberes, símbolos y valora-
ciones que se articulan en su sentido del mundo median a su vez sus relaciones
sociales, las relaciones con su propia subjetividad y con la naturaleza.
La construcción de ese sentido ha estado con frecuencia asociado con contenidos
religiosos; es decir, con contenidos que remiten a entidades y fenómenos sobre-
naturales, suprahistóricos. Por medio de esto, el ser humano resuelve en algún modo e
incorpora a la simbolización de la vida, su propia experiencia de ser trascendido por la
realidad en la que se desenvuelve y de la que forma parte: la naturaleza, las relaciones
sociales, las estructuras de poder, la inevitabilidad del dolor y la muerte, el éxtasis, la
belleza, su propia y compleja dimensión psíquica, el azar, los momentos de fuerte
convulsión social y también los momentos de fuerte integración social.
Las religiones constituyen sistemas de construcción de un sentido que responde a
este tipo de demanda referida a lo sobrenatural; una demanda que es diversa en tanto
que los contextos en los cuales se producen son también diversos.
Religión y sociedad
De plano enunciamos un principio básico que, al tomar para nosotros un rango
epistemológico fundamental, se constituye en eje articulador de nuestra elección
teórica; a saber:
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La relación entre el fenómeno religioso (eclesial, en este caso) y la dinámica
general de la sociedad se rep r esenta en términos de una autonomía relativa, siendo
por lo tanto una relación mediata, no directa ni mucho menos mecánica, unívoca o
in s t r umental.
No se pretende abstraer el fenómeno religioso-eclesial del contexto histórico
general en el cual se inscribe y de sus determinaciones, a la manera de una esfera
totalmente autónoma y autodeterminada; sin embargo, se pretende rescatar
sociológicamente la especificidad del fenómeno religioso-eclesial.Es necesario que la
elaboración teórica permita un amplio margen analítico-explicativo que permita
abordar lo religioso-eclesial desde sus propias coordenadas, sin que ello conduzca a
una compartimentalización artificiosa de la realidad social.
Al respecto, es fundamental retomar una aproximación al fenómeno de la religión
que la concibe como un medio simbólico estructurado y estruc t u r a n t e ; es decir, no
solo determinado por la totalidad social, sino también en cuanto principio de
estructuración del mundo y particularmente de un determinado campo de objetividad.
Así pues, desde la perspectiva de los campos de objetividad(político, educativo, etc.,
en los cuales se identifican pr od u c t o r es y co n s u m i d o r es que ocupan posiciones
distintas y poseen volúmenes diferentes del capital propio del campo respectivo), el
campo re l i g i o s o se identifica como el campo específico de consumidores y
productores de los bienes de salvación. En términos generales, se entiende que “el
campo religioso (...) no sólo es un producto de las relaciones y conflictos (macro)
sociales sino que se constituye a sí misma como una red específica de relaciones
(micro) sociales, con una cierta realidad y estabilidad propias y particulares”3.En esta
perspectiva, se considera que los conflictos que se generan propiamente en el campo
religioso constituyen su principio dinámico.
De este modo, se hace factible escapar a lo que Bourdieu alude como la
alternativa simplista: “la oposición entre la ilusión de la autonomía absoluta del
discurso mítico o religioso y la teoría reduccionista que considera que éste es el reflejo
directo de las estructuras sociales”4.
3 Maduro, Otto. Religión y Conflicto Social. México, D.F.: Editora Integrada Latinoamericana,
1980. pp. 125-126.
4 Bourdieu, Pierre. Génesis y Estructura del Campo Religioso. Traducción libre del artículo en
francés: “Genèse et structure du champ religieux” Revue française de Sociologie, avril-juin, 1971.
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