Table Of ContentContacto Cero:
Cómo vencer al narcisista
H G Tudor
Todos los derechos reservados
Copyright 2016
Contacto cero:
Cómo vencer al narcisista
HG Tudor
Todos los derechos reservados. Queda rigurosamente prohibida la
reproducción parcial o total de esta obra por cualquier medio o
procedimiento, incluidos la reprografía y el tratamiento informático, sin la
autorización previa y escrita del titular del copyright.
Título original: No Contact: How to Beat the Narcissist
Traducción: Lourdes Briones Camelo y Dev O'Tea
Publicado por Insight Books
1. Introducción
El concepto de "Contacto Cero" es considerado por muchos la manera más
efectiva en que la víctima puede escapar de la influencia y los efectos del
narcisista. Dicha creencia es totalmente acertada. En efecto, el Contacto Cero
inflige al narcisista un golpe mortal. Sin embargo, es difícil de implementar
y aún más difícil de mantener. Por ello, explicaré y analizaré el concepto de
Contacto Cero desde la perspectiva del narcisista, lo que te proporcionará una
visión, hasta ahora inédita, sobre cómo este principio funciona y afecta a los
de mi especie y, lo que es más importante, este libro te proporcionará una
información y conocimiento inestimables que te asistirán en tu misión de
vencer al narcisista.
El punto de partida para comprender cuál es la mejor manera de
implementar y mantener el Contacto Cero con el narcisista, es comprender
qué es lo que el narcisista quiere. Cuando se plantea esta pregunta, muchos
sugieren que persigue el control, dominación, superioridad, atención,
admiración, la destrucción de quienes se oponen a él o ella, y otras similares.
Todas estas respuestas son correctas, pero, de hecho, sólo son valores
añadidos de la única cosa que el narcisista quiere: "Combustible". La única
razón por la cual nuestra especie se involucra con ciertas personas es porque
estas nos proveen una cosa: combustible. Es todo cuanto queremos.
El de combustible, es un término que engloba todo tipo de reacción
emocional, ya sea a través de palabras o hechos, que nos proporciona otra
persona. Puede ser una mirada de admiración, un comentario cortés, insultos
furiosos, ruegos llenos de lágrimas o un tierno abrazo. Todos estos actos, y
muchos otros, nos proporcionan combustible. Necesitamos combustible. El
combustible es lo que asegura nuestra existencia por las razones que explico
con más detalle en mi libro Combustible. Necesitamos este combustible
todos los días. Por esta razón, invariablemente, seleccionamos una fuente
principal, o primaria, que nos proporcione este combustible y además
establecemos líneas de aprovisionamiento con muchas fuentes
complementarias para asegurar un flujo constante de combustible durante las
horas que estamos despiertos. La desaparición de este combustible es lo que
más tememos. Si disminuyes o, peor aún, haces que cese el suministro de
combustible, nos veremos obligados a tomar medidas drásticas. Lo primero
que haremos es tratar de restablecer el suministro de combustible utilizando
todo tipo de instrumentos manipuladores de nuestro diabólico arsenal. Si el
cese continúa, entonces no nos queda más opción que obtener nuestro
combustible de una fuente alternativa. No se nos puede privar durante
demasiado tiempo de este valioso recurso. Las consecuencias de no recibirlo
son algo que no podemos contemplar.
En consecuencia, la instauración del Contacto Cero traerá consigo el cese
del suministro de combustible. Nosotros lucharemos por restablecerlo
aunque, en el caso de los narcisistas "menores" o inferiores, la lucha será de
breve duración puesto que el gasto de energía que se requiere para ello pronto
superará con creces a la ganancia potencial. Si a esto le unimos el temor a los
efectos de quedar privado de combustible durante mucho tiempo, el
Narcisista Menor se verá obligado a buscar combustible en otra parte y tú
quedarás libre de su presa.
El "Gran Narcisista", o narcisista superior, utilizará sus artimañas
manipuladoras durante un período más largo, motivado por dos objetivos:
obtener el combustible ultra potente que le da el seducirte y aspirarte de
nuevo en su mundo, y el deseo de castigarte por haber osado interrumpir tu
suministro de combustible. Por lo tanto, te verás sometida durante más
tiempo mientras el narcisista superior lucha sin tregua para asegurarse de
nuevo el suministro y arremeter de nuevo contra ti. Incluso en los casos en
que el narcisista, superior o inferior, finalmente desista de su intento de
recuperarte como fuente de combustible a corto plazo, jamás renunciará a ti
por completo. Si le das la oportunidad, te seducirá y te aspirará de nuevo en
su mundo para recuperar el suministro de combustible. El narcisista nunca
desaparece, solo se adormece como un virus latente preparado para resucitar
cuando las condiciones sean favorables. Por esta razón deberás estar siempre
en guardia y no penetrar en su esfera de influencia.
Por consiguiente, el Contacto Cero es el golpe fatal para el narcisista. De
este modo le privarás de su preciado combustible y, eventualmente, se verá
obligado a dejarte en paz y buscarse otra fuente. Aun así, no podrás bajar la
guardia del todo pero, al menos, el Contacto Cero te permitirá vivir liberada
de la tóxica influencia de tu narcisista el resto de tu vida. Es la estaca en el
corazón del vampiro; la bala de plata que mata al hombre lobo, la kryptonita
que convierte a Superman en un hombre corriente. Contacto Cero es el arma
termonuclear en el arsenal de la víctima y, si se utiliza adecuadamente y,
sobre todo, si se mantiene, te liberará casi por completo de las garras del
narcisista.
Sin embargo, necesitas saber cómo utilizar esta arma, cómo disparar la
bala y dónde apuntar, de otra manera esta oportunidad de oro se convierte en
una oportunidad perdida para deshacerte del narcisista que afecta tu vida.
"Contacto cero" es un concepto muy simple. Es la cesación total y
absoluta de todo contacto con el narcisista, en todos los niveles y en toda
circunstancia. Es el cese completo de toda comunicación. Es la erradicación
del narcisista de cada aspecto de tu vida y el comprometerte firme e
inquebrantablemente a nunca apartarte de esta decisión. Se trata de alejarte y
mantenerte alejada.
Convendrás conmigo en que se traduce en un concepto simple y directo,
y, sin embargo, es muy difícil de llevar a cabo en la práctica. Esto se debe a
dos razones: 1) lo que tú harás y, 2) lo que el narcisista hará.
Para cuando te hayas dado cuenta de que has caído en las garras de un
narcisista, es posible que ya hayas sufrido años, muchos años, de los ciclos de
atracción y rechazo, de seducción y devaluación, de descarte y recuperación.
Es poco probable que te hayas percatado de lo que estaba sucediendo sin
haber recibido ayuda del exterior porque actuamos de manera tan sutil e
insidiosa que es difícil que te des cuenta por ti sola. Necesitas que otros te
obliguen a abrir los ojos y tomar conciencia y te arranquen de la falsa
realidad que hemos creado y en la que te hemos mantenido encerrada. Para
cuando hayas tomado conciencia de esto, el período de abuso al que has sido
sometida habrá sido sustancial y significativo. Estarás agotada y
posiblemente hayas sufrido un colapso nervioso. Exhibirás síntomas de
estrés postraumático con pérdida de confianza, la autoestima por los suelos,
tu capacidad de enfrentarte a los obstáculos erosionada y tu razonamiento
analítico erradicado. Te encontrarás en una posición extremadamente
vulnerable. Esto te hará muy susceptible a "ser aspirada" por el narcisista
para hacerte bailar de nuevo con él. No puedes culparte por volver a caer en
su trampa; con pocas defensas te enfrentas al encanto y la seducción del
narcisista y a su promesa de vivir otra "época dorada" con él. Pocos pueden
resistirse en tal estado de fragilidad, se dejan seducir y son engullidos de
nuevo en el mundo del narcisista. Las víctimas gozan así de un período de
regocijo en el cual el narcisista produce la misma ilusión que embaucó a la
víctima la primera vez, antes de que la devaluación y la denigración
comiencen de nuevo. Este ciclo se repetirá una y otra vez. Personas
inteligentes, independientes, autosuficientes y fuertes volverán a caer y se
dejarán seducir, devaluar, descartar y aspirar por el narcisista.
No debe avergonzarte admitir que es lo que te ha sucedido porque, incluso
las personas con más habilidades sociales, conscientes emocionalmente e
intuitivas, pueden caer, y de hecho caen, en la trampa del narcisista. Somos
grandes expertos en el arte de la ilusión seductora. Hemos sido creados para
seducir con el fin de obtener nuestro combustible. Tenemos mucha
experiencia en atraer a las personas con nuestras dulces palabras y falsas
promesas, y casi nadie puede resistirse a nosotros. Si no pudiste resistirte en
un principio, antes de que te drenáramos, ¿cuáles son tus probabilidades de
resistir nuestras proposiciones cuando te tenemos en un estado de
extenuación y deterioro total?
Es por ello que el Contacto Cero resulta tan difícil para ti, por el estado en
que te encuentras cuando finalmente te das cuenta de que debes
implementarlo. Por desgracia, tus dificultades no terminan allí: no sólo te
hemos despojado de los recursos que podrían ayudarte a mantenerte alejada y
sin contacto con nosotros, sino que, además, te someteremos a un ataque
constante con el fin de aspirarte de nuevo en nuestro mundo.
Más adelante explicaré lo que puedes prever que pase cuando trates de
cortar el contacto con nosotros; la campaña de difamación que lanzaremos
contra ti y los variados juegos de poder que utilizaremos. Saber todo lo que
pasará y cómo se manifestará te será de gran ayuda para poder cortar el
contacto definitivamente y vencer al narcisista. Muchas personas no logran
hacerlo la primera vez por las siguientes razones:
• No son lo suficientemente fuertes.
• No tienen ni idea de lo peligroso que el narcisista puede llegar a
ser cuando se trata de cortar el contacto.
• No han preparado su fuga y cometen muchos errores básicos.
• No han leído este libro.
Su lectura te desvelará cómo el narcisista percibe el Contacto Cero, cómo
reaccionamos ante él, qué haremos y lo que tú deberás hacer, pero, ante todo,
este libro te permitirá ahondar en la mente sinuosa y perversa del narcisista y
comprender por qué pasan las cosas que pasan. Como víctima de un
narcisista, tendrás fuertes cualidades empáticas; uno de estos rasgos
empáticos es el deseo de saber. A los empáticos les gusta saber por qué
pasan las cosas. Nosotros, por el contrario, no estamos interesados en los
porqués, solo nos interesa el resultado, lograr nuestros objetivos sin importar
la razón. La persona empática quiere saber, necesita comprender y esto es lo
que irremediablemente acabará por causar su ruina. El narcisista no es un ser
lógico o, por lo menos, no según la lógica que tú conoces. En nuestro mundo
lo vemos todo muy claro y todo tiene sentido. Esto no se aplica a la manera
que tú tienes de ver las cosas. Nosotros podemos decir algo y desdecirnos
por completo al minuto siguiente. Tú nos indicarás esta contradicción y
nosotros la negaremos, a veces hasta el punto de negar haber dicho lo que
dijimos al principio. Para ti se escapa de toda lógica y no puedes comprender
cómo no podemos ver lo que acabamos de decir o hacer. Para nosotros, en
cambio, se trata de un dispositivo necesario que nos permite mantener la
sartén por el mango. Afirmamos así nuestro control sobre ti y, lo que es más
importante, tu perplejidad ante nuestro comportamiento contradictorio nos
proporciona combustible. Tú ni siquiera te percatas. Como no lo puedes
entender, continuarás esforzándote (y queremos que lo hagas) para encontrar
una respuesta basada en la lógica de tu mundo. Nunca lo conseguirás. Todo
lo que harás es seguir dándonos el poder sobre ti. Seguirás suministrándonos
combustible. Estarás confusa, ansiosa y agotada tratando de entender por qué
hacemos lo que hacemos. Siempre cometes el mismo error. Tratas de
analizar nuestro comportamiento desde tu punto de vista. Así no lo
conseguirás. Cuando aprendas a ver el porqué de lo que hacemos y decimos
desde nuestro punto de vista, todo empezará a encajar. Te seguirá
pareciendo ilógico, pero por lo menos tendrá sentido.
Esa es la clave para poder implementar con éxito el Contacto Cero.
Necesitas conocer a tu enemigo antes de siquiera esperar vencerlo. Necesitas
entender por qué actuamos como actuamos y por qué tomamos ciertas
medidas de modo que puedas optimizar tus posibilidades de implementar el
Contacto Cero y, sobre todo, mantenerlo.
Esta información únicamente puede provenir de la mente del narcisista.
Hay muchos que conocen bien el concepto de Contacto cero porque han
experimentado anecdóticamente su efectividad. Los profesionales y
terapeutas son muy conscientes de lo efectivo que resulta el Contacto Cero
contra el narcisista. Incluso tendrán una comprensión rudimentaria de por qué
es tan eficaz, pero no podrán precisar o explicar con detalle la razón de que lo
sea en el modo en que sólo el narcisista puede. Como yo puedo.
Hay muchas víctimas (o supervivientes, si prefieres utilizar esa palabra)
que se han visto involucradas con un narcisista. Las víctimas experimentaron
la seducción vertiginosa, la fascinante época dorada durante la cual tuvieron
la impresión de haber encontrado al fin su alma gemela. Fueron
bombardeadas con amor y cariño y puestas en un pedestal. Después vivieron
la incomprensible y despiadada devaluación, y se vieron confrontadas al odio
y desprecio del narcisista sin entender por qué todo eso sucedía. Se aferraron
desesperadamente tratando de comprender por qué se les estaba tratando de
forma tan horrible. Se aferraron, tratando de volver a la época dorada, sólo
para terminar siendo desechadas como un despojo y, estando todavía
confundidas y aturdidas, el narcisista las atrajo y encerró de nuevo en su falsa
realidad. Las víctimas regresan por voluntad propia puesto que no
comprenden que ha sido sólo un paso más en el largo camino con el
narcisista. Muchas víctimas sufrirán este vaivén durante años y contarán con
numerosas historias de batallas en su guerra personal contra el narcisista. Sin
duda, estas historias y recuerdos tienen valor. Las víctimas han vivido en
carne propia la seducción, devaluación, descarte y aspiración del narcisista,
conocen sus movimientos y pueden identificar las señales de alarma una vez
que han tomado distancia y se recuperan de su tórrida experiencia. Esto les
permite aconsejar a otros que se encuentran en situaciones similares, incluso
si todavía no comprenden por qué sucedieron ciertas cosas y por qué el
narcisista se comportó como lo hizo. Las víctimas pueden advertir a otros e
indicar y alertar de las señales, pero, en definitiva, no conocen en
profundidad al narcisista.
Para comprender plenamente la reacción del narcisista ante la decisión de
la víctima de no tener ningún contacto con él o ella, sólo hay una fuente de
información a la que acudir: el propio narcisista.
La lectura de este libro te permitirá acceder a la mente del narcisista y
aprender todo sobre el por qué hacemos lo que hacemos. En ocasiones no
será una lectura fácil pues probablemente te traiga amargos recuerdos de
experiencias desagradables. Pero no me disculparé por ello. No escribo para
suavizar los golpes; no te haría ningún favor. Escribo para decirte cómo son
las cosas exactamente a fin de que puedas sacar el mejor provecho de esta
información. Esta es la mejor manera de que comprendas. En este libro te
contaré todo lo que deberás hacer para cortar definitivamente el contacto y
todo lo que tu narcisista probablemente hará en respuesta a esta medida.
¿Cómo sé todo esto? En primer lugar, soy un narcisista. Gracias a mi
intelecto y a la terapia que estoy siguiendo, tengo conciencia de lo que soy.
En segundo lugar, varias de mis víctimas han intentado cortar todo contacto
conmigo; por lo tanto, he vivido el otro lado de esta situación, desde la
perspectiva del narcisista. He reaccionado, atacado y saboteado la decisión
de mis víctimas de implementar el contacto cero conmigo. Sé cómo minar
tus defensas y qué hacer exactamente para que tu intento de Contacto Cero
fracase. Conozco muchos engaños y artimañas de manipulación para hacer
que el incauto caiga en la trampa y entre de nuevo en la pesadilla. Lo he
hecho en incontables ocasiones y doy fe de la efectividad de estos métodos.
En tercer lugar, sé de antemano cómo reaccionará tu narcisista porque todos
los de mi especie actuamos de manera muy similar. Algunos somos más
perversos que otros. Algunos vamos más lejos que otros en el afán de
procurarnos combustible y castigar a nuestras víctimas. Algunos mostramos
un mayor grado de sadismo en nuestro comportamiento. En definitiva,
algunos actuamos de manera más osada pero, finalmente, nuestros
comportamientos son muy parecidos. Esto se debe a una simple razón:
porque funcionan. Actuamos de manera similar porque sabemos que
nuestros métodos alcanzan nuestros objetivos. De ahí que no sintamos la
necesidad de actuar manera diferente. He observado a otros de mi especie
seducir y denigrar y he constatado las semejanzas. La información que los
"buenos doctores" me han proporcionado en el curso de mi terapia también
me ha ayudado y se suma a esta biblioteca de información sobre nuestro
comportamiento.
Por eso puedo explicarte por qué nos comportamos como lo hacemos y
por qué lo que se aplica a mí se puede trasladar también al narcisista en tu
vida.
Te preguntarás qué es lo que motiva a un narcisista a compartir esta
información de manera aparentemente caritativa. ¿Por qué un narcisista
revelaría sus secretos para ayudar a otras personas? Con seguridad divulgar
tal información debe ser contraproducente ¿no?
Como ya he explicado en otras ocasiones, hay muchas víctimas
potenciales en este mundo. No todas podrán leer y aprovechar la valiosa
información que contienen estas páginas. Siempre habrá quienes ignoren
todo sobre nuestra especie, nuestras tretas y, por lo tanto, no nos faltarán
víctimas. Mi vida no será más difícil de ninguna manera por compartir esta
información. Además, no hago esto porque desee ayudar, lo hago porque me
gusta escribir. Forma parte de la terapia que, por razones personales, me he
comprometido a seguir. La difusión de esta información, que en parte emana
del conocimiento más profundo que he adquirido gracias a mi terapia, se ha
convertido en una condición de mi tratamiento. Por consiguiente, tienes la
oportunidad de acceder a estos conocimientos porque tengo que ponerlos
sobre papel. A mayor abundamiento, creo firmemente en la
autodeterminación y, al poner esta información en tus manos, te estoy
brindando la oportunidad de decidir tu propio destino.
Pero, sobre todo, hago esto porque me gustan los retos. El forcejeo que
puedo tener con una persona empática decidida a escaparse de mis garras,
junto con la perspectiva de cosechar todo ese potente combustible que me da
el conquistarla de nuevo, hacen que me estremezca de placer. Si, como
consecuencia de haber leído esta publicación, mis víctimas son capaces de
oponer más resistencia, que así sea, nada me complacerá más. Las
posibilidades de que alguien a quien quiera seducir lea esto son pequeñas. Y,
si lo hace, la convertirá en un blanco más atractivo para mí, para hacerla caer
en mi trampa y hacer fracasar sus intentos de mantener el Contacto Cero.
Por conveniencia, porque soy un hombre, he escrito este libro
representando a la víctima como una mujer y al narcisista como el varón. Sin
embargo, es importante precisar que un hombre puede evidentemente caer
víctima de un miembro femenino de mi especie.
Por último, quiero reconocer el excelente trabajo de Lourdes Briones en
la traducción de este libro del inglés al español y el de Dev O'Tea, por su
excelente revisión y edición del manuscrito. Por supuesto, los miembros de
mi especie están en todas partes y es muy importante que mi trabajo sea
difundido tan ampliamente como sea posible. Me gustaría por ello dar las
gracias a Lourdes, por la rapidez en que llevó a cabo una primera traducción
al castellano, y a Dev O'Tea el tiempo dedicado a ultimar esta versión final a