El empleo y la recuperación de personas con trastornos mentales graves. La experiencia de ...

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El empleo y la recuperación de personas con trastornos
mentales graves. La experiencia de Andalucía
Employment and recovery of people with severe mental disorders.
The Andalusian experience
Marcelino López Álvarez.
Psiquiatra y sociólogo.
Director de programas, evaluación e investigación FAISEM.
Resumen: El texto pretende favorecer la reflexión teórica y el desarrollo de programas de
empleo para personas con trastornos mentales graves, partiendo de la consideración del
empleo a la vez como un indicador y un instrumento de recuperación de dichas personas.
Para ello se resumen en primer lugar las perspectivas actuales sobre este relativamen-
te novedoso concepto (“recuperación”), ligado a los movimientos profesionales de
rehabilitación psicosocial y atención comunitaria, pero también a la emergencia y con-
solidación de asociaciones de usuarios y usuarias de servicios de salud mental.
Perspectivas que se enlazan con los conocimientos sobre las dificultades, posibilidades
y metodologías de empleo de este colectivo, resumiéndose por un lado información
científica y tecnológica, pero también información más práctica derivada de la experien-
cia de desarrollo de este tipo de programas en la Comunidad Autónoma de Andalucía.
Palabras clave: Recuperación, programas de empleo, rehabilitación psicosocial, personas
con trastorno mental grave.
Summary: This text is an attempt to stimulate theoretical considerations and the deve-
lopment of employment programs for people with severe mental disorders starting on
the base of considering employment both as an indicator and an instrument for recovery
for these people.
We summarize in the first place current perspectives on this relatively new concept
(“recovery”), linked to psychosocial rehabilitation and community mental health care
professional movements, as well as the emergence and consolidation of associations
from users of mental health services.
These perspectives are linked to the knowledge of the difficulties, possibilities and
employment methodologies of this collective, and then we summarize some scientific
and technological information and also more practical information derived from the
experience in the development of this type of programs in the Autonomous Community
of Andalusia.
Key words: Recovery, employment programs, psychosocial rehabilitation, people with
severe mental disorders.
Norte de salud mental, 2010, vol. VIII, nº 36: 11-23 11
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Marcelino López Álvarez
Presentación Experiencia que pretende basarse en el conoci-
miento teórico y técnico que resumimos en la
Hablar de empleo y de recuperación, en relación
primera parte del texto.
con personas afectadas por lo que denomina-
mos trastornos mentales graves, es a la vez inte-
Esperamos con todo ello facilitar elementos de
resante y problemático. Interesante porque los
reflexión que, sometidos a la crítica constructiva
dos primeros términos indican aspectos de
que un espacio como este permite, nos ayuden a
especial relevancia en relación con las dificulta-
todos y a todas a mejorar nuestros programas de
des pero también con las posibilidades de inclu-
empleo e inclusión social y con ellos la situación
sión social que tienen esas personas, en los
del mayor número posible de personas con las
entornos sociales en los que viven. Pero también
que trabajamos.
problemático porque, a pesar del interés teórico
intrínseco de cada uno de dichos términos y de
su interrelación, ambos aspectos tienen hoy un La recuperación y empleo
desarrollo insuficiente en nuestras sociedades. Y
Una primera referencia teórica aunque con impli-
ello incluso tras décadas de esfuerzos por parte
caciones prácticas evidentes es la relativa al tér-
de muchas y muchos profesionales y personas
mino “recuperación”, que tiene un uso creciente
afectadas.
en el campo de la atención a personas con tras-
tornos mentales graves, especialmente de aque-
Con el fin de contribuir a que el interés teórico
llas diagnosticadas de esquizofrenia (1-4). Uso
mejore sus repercusiones prácticas y afecte sig-
creciente que sigue sin embargo mostrando
nificativamente a un número creciente de perso-
algunas imprecisiones, matices e incluso en oca-
nas con este tipo de problemas, el texto que
siones visiones contrapuestas (1, 3-9).
sigue pretende simplemente exponer algunas
consideraciones generales sobre el tema.
De hecho, en una primera aproximación, pode-
Consideraciones que se basan tanto en el cono-
mos encontrar al menos tres sentidos distintos en
cimiento teórico y técnico acumulado a escala
el uso del término recuperación, sentidos que se
internacional, como en nuestra mucho más limi-
confunden a veces en la literatura relacionada con
tada y concreta experiencia.
las personas con este tipo de problemas (1, 3-10):
Así, se resumen el él algunos aspectos significa- a. En primer lugar, en concordancia con su uso
tivos referidos, por un lado, al término recupera- en el lenguaje ordinario y de manera similar
ción y, por otro, a lo que sabemos hoy sobre los a lo que sucede en el caso de otros proble-
mecanismos que permiten mejorar el acceso y mas de salud, se puede entender el térmi-
mantenimiento en el empleo de este tipo de per- no, en sentido estricto, como la recupera-
sonas, considerando el empleo a la vez como un ción del nivel de funcionamiento previo al
indicador y como un factor condicionante de la inicio de la enfermedad, equiparándose
recuperación de las mismas. Resumen que parte entonces al concepto de “curación” (2, 10).
de una revisión necesariamente breve de la
abundante literatura profesional referida a b. Es evidente que ese uso tiene dificultades
ambos temas y que se completa (al final) con en el caso de personas con trastornos men-
algunas de las referencias bibliográficas que nos tales graves, en las que no es fácil hablar ni
parecen más útiles a este respecto, incluyendo de niveles de funcionamiento previos a la
algunas que se basan a su vez en revisiones aparición de la enfermedad ni de curación
mucho más exhaustivas. en sentido estricto (4, 10). Por ello podemos
utilizar ese término, en un sentido menos
Pero la reflexión teórica debe añadir referencias estricto, para hablar de recuperación como
prácticas y por ello el texto presenta también las remisión significativa si no total de los sín-
líneas generales de la experiencia que desde la tomas y, especialmente, de las alteraciones
Fundación Pública Andaluza para la Integración del funcionamiento personal y social que
Social de Personas con Enfer medad Mental (FAI- caracterizan habitualmente a este tipo de
SEM) venimos desarrollando en Andalucía. trastornos (4, 11, 12).
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c. Pero también, y este es un sentido especial- teniendo en cuenta lo que sabemos, desde la
mente importante en este colectivo y en el investigación empírica pero también desde los
de otros afectados por enfermedades cróni- relatos personales de procesos o itinerarios de
cas, podemos utilizar la palabra “recupera- recuperación, sobre los efectos que la rehabilita-
ción” para referirnos a la posibilidad de ción vocacional y el empleo tienen en distintos
recuperar o alcanzar una vida satisfactoria y aspectos de la vida de las personas con este tipo
dotada de sentido, incluso aunque persista de problemas (20-31).
la enfermedad y con ella determinados nive-
les de sintomatología y discapacidad (1-9).
Las personas con trastornos mentales
graves y el empleo
Esos distintos significados se mezclan y confun-
den a veces cuando hablamos de recuperación Hablamos de personas con trastornos mentales
de personas con trastornos mentales graves. De gravesy aunque parece que nos entendemos, no
manera más específica y siempre en relación siempre el concepto está claro para quienes lo
con este colectivo, nos encontramos hoy en la oyen e incluso para quienes lo emplean. Para
literatura profesional relacionada con el tema, nosotros se trata de un grupo de personas no
con dos “modelos” o visiones de la recupera- muy numeroso pero si muy importante, por sus
ción, que pueden considerarse como alternati- problemas y dificultades, pero también porque
vos pero que nosotros preferimos ver como hay soluciones disponibles para muchas de ellas
complementarios (3-8). y, sin embargo, la brecha que separa estas posi-
bilidades y su situación habitual sigue siendo
Por una parte, la que podríamos denominar visión enorme (2).
profesional, que a veces se denomina “recupera-
ción de la enfermedad” o “recuperación como Según la definición clásica (2, 32) se trata de per-
resultado” (3, 8-12), basada en la evidencia clínica sonas identificadas por tres factores: el diagnós-
y especialmente epidemiológica (13, 14) y que tico (esquizofrenia, psicosis afectiva, trastornos
tiende a relacionarse con el efecto de las interven- graves de personalidad, etc.), la duración prolo-
ciones profesionales, tanto farmacológicas como gada y la discapacidad. En nuestro caso
de rehabilitación psicosocial (15). (Servicios de Salud Mental de Andalucía) (33),
como puede verse en el Cuadro 1, utilizamos una
Y por otra, la visión de las personas directamen- definición que incorpora criterios de necesida-
te afectadaspor el problema (3-10, 16, 17), que des de atención. Precisamente esos criterios tie-
se traduce por las expresiones de “recuperación nen en cuenta que la atención a estas personas
enla enfermedad” o “recuperación como proce- ha experimentado importantes cambios concep-
so”, se basa en relatos personales y análisis cua- tuales y técnicos en las últimas décadas, cam-
litativos de experiencias directas de recupera- bios que se relacionan con lo que hemos deno-
ción y que enfatizan los aspectos subjetivos y el minado paradigma tecnológico de la Atención
papel de la autoayuda, los cuidados informales y Comunitaria en Salud Mental(2), cuyas caracte-
la iniciativa personal, así como de aspectos de rísticas generales, tal y como las entendemos
“psicología positiva” (resiliencia, esperanza, nosotros, intenta resumir el Cuadro 2.
autoconfianza, etc.) (1, 4, 9, 16-20).
En el terreno de los conceptos o constructos
En ambos sentidos o visiones de la recuperación sociales, porque pretendemos pasar de identifi-
el empleoaparece siempre como un elemento de carlos como locas o locos peligrosos o personas
particular relevancia (2, 4, 9, 15, 21-26). Por un definidas por su enfermedad, a considerar que
lado, porque debemos considerarlo como un indi- lo que les define es su carácter de ciudadanos y
cador o medida de resultado de la misma, ya que ciudadanascon derechos y dificultades de ejer-
tener un empleo en nuestras sociedades es un cicio de los mismos. Dificultades que dependen
claro criterio de ciudadanía e inclusión social, de la enfermedad y la discapacidad consiguien-
que exige a su vez unos niveles razonables de te pero también, de manera muy significativa,
funcionamiento. Y, por otro, porque es a la vez de las barreras sociales ligadas al estigma y la
un factor clave en el proceso de recuperación, discriminación (2, 34-36).
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Y en el de las tecnologías organizativas y de El segundo es, por contraposición, el de las difi-
intervención, porque también estamos pasando cultades múltiples que estas personas presen-
de las grandes instituciones asilares o una aten- tan al respecto. Dificultades que derivan de los
ción exclusivamente sanitaria y de finalidad diversos aspectos de su funcionamiento que
paliativa a sistemas de atención comunitaria, resultan afectados por la enfermedad y la disca-
que hacen enfasis en redes de servicios e inter- pacidad asociada (cognitivos, afectivos, sensiti-
sectorialidad (Salud, Servicios Sociales, Empleo, vos, relacionales) y de su extraordinaria variabi-
Educación, Justicia, etc.), pretenden conseguir lidad personal y evolutiva (2, 31, 36, 38-41), pero
objetivos de recuperación y fomentan la partici- también de la afectación temprana de condicio-
pación individual y colectiva de las personas nes básicas para la actividad productiva como
afectadas que, en este caso, incluyen dos grupos son la educación, las habilidades sociales y las
diferenciados: los propios usuarios y usuarias de actitudes hacia el empleo. Aspectos a los que
los servicios y sus familiares (2). hay que añadir las interferencias que puede pro-
ducir el propio proceso de atención (medicación,
En este marco los programas de empleopara per- tiempo de tratamiento…) y sin olvidar el efecto
sonas con este tipo de problemas pueden verse múltiple del estigma dentro y fuera del mercado
también desde una doble perspectiva (31), ya laboral (35, 48). Dificultades que traducen sufi-
que pueden considerarse, por un lado, como una cientemente las cifras habituales de desempleo
prolongación de la atención sanitaria y en concre- que afectan al colectivo en distintos países y que
to de los programas de rehabilitación psicosocial. suelen superar ampliamente el 85% del mismo
Pero también hay que verlos, en el contexto de (4, 31, 41).
sociedades basadas en modelos de Estado del
Bienestar que buscan objetivos de pleno empleo, Pero también, para completar la visión de la uti-
como la aplicación de políticas de empleo a un lidad y las dificultades, tenemos que tener en
colectivo específico con grandes carencias y difi- cuenta la experiencia acumuladasobre distintas
cultades en este área. Aunque este último aspec- estrategias y programas dirigidos a mejorar el
to sufra en la actualidad las negativas repercusio- empleo del colectivo, aspecto que intentamos
nes de la crisis económica que nos afecta en resumir, con sus aspectos positivos y negativos
estos últimos años. en el Cuadro 3 (31, 42, 43). Intentando aprender
tanto de sus éxitos como de sus fracasos, pode-
En ese marco, una estrategia razonable que mos valorar, en primer lugar, la escasa efectivi-
pretenda promover el empleo de personas con dad de aproximaciones tradicionales como las
este tipo de problemas debe tener en cuenta de las laborterapias institucionales o los emple-
una serie de aspectos concretos que vamos a os protegidos, “Terapia Industrial”, o Talleres
intentar resumir brevemente a continuación ocupacionales, a la hora de conseguir empleos
(2, 21, 31, 37-47). estables para las personas con trastornos men-
tales graves (25, 26, 33). Pero también la exis-
El primero es el de las funcionesque el empleo tencia de tres tipos de estrategias o programas
juega en la vida de todas las personas, pero que tienen algún tipo de utilidad comprobada.
especialmente de aquellas que se ven afectadas
por este tipo de problemas. Por un lado, en En primer lugar, los programas de rehabilitación
tanto que actividad (estimulo cognitivo, organi- vocacional, prolongación de los de rehabilita-
zador de la vida cotidiana y vehículo de relacio- ción psicosocial general mediante actividades
nes sociales), pero también como fuente de de orientación, entrenamiento en habilidades de
ingresos económicos y especialmente como búsqueda de empleo, formación profesional,
garantía de un papel social activo, con su corres- empleo de transición, etc. (41, 44) Actividades
pondiente valoración social y mejora de la auto- que parecen útiles para dar un empujón inicial
estima. Aspectos que parece lógico considerar hacia el empleo pero tienen dificultades para
importantes para favorecer la recuperación de garantizar su mantenimiento por si solas.
dichas personas y que además van siendo pro-
gresivamente confirmados en distintos estudios Como alternativa a estos, en los últimos 15 años
experimentales (15, 22-31, 37-40). se desarrollan experiencias de empleo con
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apoyo, fundamentalmente en Estados Unidos, Recordando algunas cosas ya conocidas,
con estrategias de búsqueda rápida y apoyo fle- Andalucía, con ya algo más 8 millones de perso-
xible y de larga duración en el puesto de trabajo nas ha sido tradicionalmente una región atrasa-
(29, 41, 45-47). Experiencias que intentan gene- da, en términos económicos y sociales, con una
ralizar intervenciones probadas en otros colecti- tasa de desempleo general y unos ingresos per
vos con discapacidad y que cuentan con impor- capita que se mantienen, respectivamente, la
tante evidencia experimental, al menos en su primera claramente por encima y los segundos
contexto de origen, aunque pueden presentar por debajo de las correspondientes tasas
algunas dificultades de adaptación a otros paí- medias del Estado. Pero también es una región
ses. Este último aspecto, que fue siempre el que ha experimentado un desarrollo importante
foco principal de la crítica europea a este tipo en las últimas décadas, asociado al proceso
de programas, empieza sin embargo a relativi- general de democratización, descentralización e
zarse con la publicación de resultados de estu- integración en Europa posterior al final de la dic-
dios experimentales en Canadá (49) y Europa tadura, pero también a un énfasis sostenido en
(50, 51), que muestran su buen funcionamiento políticas sociales y el desarrollo de servicios
también en estos contextos, al menos en lo que públicos.
respecta al acceso al empleo y su mantenimien-
to en los primeros años. Un aspecto parcial pero importante de ese des-
arrollo es el proceso de Reforma Psiquiátrica
Y, finalmente, en el contexto europeo, las expe- (58-60), puesto en marcha en 1984 y que ha per-
riencias de desarrollo de empresas socialesque mitido cerrar progresivamente los 8 Hospitales
tratan de encontrar una síntesis entre la especi- Psiquiátricos públicos y generar un nuevo sistema,
ficidad del empleo protegido y las ventajas inte- basado en principios de Atención Comunitaria
gradoras del empleo en empresas reales (51-57). en Salud Mental, con una red de servicios sani-
Aunque no hay todavía estudios experimentales, tarios integrados en el Sistema sanitario general
al menos publicados, al respecto, sí hay un (Servicio Andaluz de Salud), que se coordina
número importante de experiencias, muchas de con una red de recursos de apoyo social, depen-
ellas agrupadas en CEFECa, que muestran su uti- dientes de la ya mencionada Fundación Pública
lidad para facilitar empleo sostenido a personas Andaluza para la Integración Social de Personas
con este y otros tipos de discapacidad. con Enfermedad Mental (FAISEM).
La Fundación, que depende de los departamen-
La experiencia de Andalucía tos gubernamentales (Consejerías de la Junta de
Andalucía) de Salud, Igualdad y Bienestar Social,
Después de esta somera revisión teórica, quiero
Empleo y Economía y Hacienda, dispone de dis-
presentar alguna información sobre nuestra limi-
tintos programas para personas con trastornos
tada, pero creemos que interesante, experiencia
mentales graves, en áreas como el alojamiento,
de construir un sistema que apoye el empleo de
la ocupación, las tutelas, el apoyo a los movi-
personas con este tipo de problemas en un terri-
mientos asociativos de familiares y usuarios y,
torio cercano: la Comunidad Autónoma de
aspecto sobre el que vamos a centrar nuestra
Andalucía. Experiencia que no pretendemos ofre-
intervención, el empleo (60, 61).
cer como un “modelo” a imitar, sino como una
aproximación global y a la vez concreta para inten- En ese contexto, nosotros entendemos que el
tar mejorar una situación hasta ahora deficiente empleo de personas con trastorno mental grave
en el conjunto de territorios del Estado español y, precisa de la articulación de distintas estructuras,
en concreto, en Andalucía. Comunidad Autónoma con funciones específicas, que deben coordinarse
que, como es sabido, tiene rasgos comunes pero para atender a personas concretas (Cuadro 4)
también específicos en relación con las restantes (31, 42, 43, 62, 63), e integrarse en un abordaje
Comunidades que componen el Estado. global, sociosanitario de su atención, regida por
aConfederación Europea de Empresas Sociales, Iniciativas de Empleo y Cooperativas, organización no gubernamental que asocia organiza-
ciones de 15 países europeos (56, 57).
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un protocolo común de actuación, denominado en En referencia a finales del año 2008 (61), las cifras
el caso de Andalucía “Proceso Asistencial de personas atendidas en este programa son, tal
Integrado Trastorno Mental Grave” (33): y como recoge el Cuadro 5, las siguientes:
1. Los servicios de salud mental del Sistema
1. Los 8 Servicios de Orientación y Apoyo al
Sanitario Público, especialmente los Equi-
Empleo han atendido un total de 2.544 per-
pos Comunitarios y las Unidades de Reha-
sonas con trastornos mentales graves, deri-
bilitación, que deben garantizar una aten-
vadas desde los servicios de salud mental
ción sanitaria correcta, centrada en la recu-
para las distintas prestaciones del programa,
peración y el desarrollo de habilidades
incluyendo también actividad ocupacional.
necesarias para la vida social, así como
En relación con las que se orientaron hacia el
dando un primer impulso y orientación
empleo, consiguieron 881 contratos en distin-
sobre el empleo (2, 33).
tas empresas para 321 de dichas personas.
2. Los Servicios de Orientación y Apoyo al La mayoría son contratos de corta duración,
Empleo (SOAE) dependientes de FAISEM y en el 60% de los casos inferiores a 3 meses,
coordinados con el Servicio Andaluz de aunque puedan repetirse en una misma per-
Empleo y que facilitan orientación, rehabili- sona, y 40 de ellos son indefinidos.
tación vocacional, formación profesional y
2. Con las 2.589 plazas teóricas con que cuen-
apoyo en la búsqueda y mantenimiento del
tan los 115 talleres ocupacionales se atien-
empleo. Aseguran además la coordinación
de, de manera regular, a 2.215 personas con
del conjunto de estructuras e intervenciones
trastornos mentales graves, si bien en la
no sanitarias (2, 33).
mayoría de los casos los objetivos a conse-
3. Una red de Talleres ocupacionalesque cum- guir con ellas son más de rehabilitación en
plen funciones diversas, entre ellas la de general que estrictamente de empleo.
servir de espacio previo al del empleo. Pese
3. Algo más de 200 de esas personas han
al debate que rodea este tipo de institucio-
seguido cursos específicos de Formación
nes y a sus riesgos de institucionalismo y
profesional, de los que el 30% han finaliza-
bloqueo de alternativas estrictamente labo-
do con algún tipo de contrato laboral
rales, nosotros pensamos que sigue siendo
(incluido en los contabilizados en el aparta-
útil como un elemento más de una red orien-
do primero).
tada a la recuperación (2, 31, 40, 42, 62).
4. Las 9 Empresas Sociales dan empleo esta-
4. Las Empresas Sociales, dirigidas desde una
ble a un total de 487 trabajadores de los
empresa instrumental (Iniciativas de Empleo
que 250 tienen un trastorno mental grave y
Andaluzas Sociedad Anónima) y que facili-
135 algún otro tipo de discapacidad. Con
tan empleo estable a un número todavía
respecto a las personas con trastorno men-
pequeño pero importante en nuestro con-
tal grave, más de la mitad de las mismas lle-
texto, a la vez que sirven de ejemplo prácti-
van al menos 5 años seguidos trabajando
co y especie de “escaparate” del conjunto
en las empresas.
del programa (31, 55, 62, 63).
5. Las iniciativas de empleo en empresas A finales de año se ha iniciado en 3 provincias
generales, apoyadas desde los SOAE que un proyecto específico de empleo con apoyo,
empezaron con una metodología inespecífi- que busca comprobar la utilidad de esta meto-
ca similar a la utilizada con otros colectivos, dología y, en su caso, extenderla luego al funcio-
pero que ahora pretendemos orientar de namiento general de los Servicios de orienta-
acuerdo a los procedimientos estrictos del ción. Si bien su desarrollo se ha visto afectado,
empleo con apoyo: mayor contacto con los como en general el conjunto del programa, por
servicios de salud mental, mayor atención a el desarrollo de la crisis económica que está
las preferencias de las personas y mayor reduciendo las contrataciones de este año alre-
intensidad y duración del apoyo personali- dedor de un 20% con relación a las reflejadas en
zado (31, 42, 45, 47, 63, 64). el cuadro.
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Sistema que pretende funcionar de manera diná- de terminar un proyecto dentro de la inicia-
mica e individualizada mediante lo que denomi- tiva EQUAL, orientado de manera prioritaria
namos “itinerarios personales hacia el empleo” a ambas poblaciones y cuyos primeros
como intenta mostrar el Cuadro 5. resultados parecen indicar que esta es una
tarea posible (61).
Algunas conclusiones 4. Seguir desarrollando empresas sociales,
y perspectivas de futuro diversificando actividades y creciendo en
capacidad de empleo.
Para finalizar la exposición y a modo de conclu-
sión hay dos aspectos a los que quiero hacer 5. Y terminar el proyecto experimental de
referencia, en la medida en que implican posicio- empleo con apoyo, en empresas generales,
nes de cara al futuro. replicando programas con evidencia empíri-
ca, Lo que esperamos nos ayude a mejorar el
El primero es el de la valoración general que
funcionamiento general de los SOAE.
podemos hacer de nuestra experiencia y las líne-
as de trabajo previstas para el futuro inmediato. Y finalmente, quiero terminar con algunas refle-
En general creemos que el programa en su con- xiones más generales sobre la necesidad de
junto ha permitido dos cosas importantes: impulsar políticas globales en este área, tanto a
demostrar que el empleo de un número significa- nivel del conjunto del Estado como de la Unión
tivo de personas con trastorno mental grave es Europea, especialmente en relación con los paí-
posible en nuestro contexto y, a la vez, mejorar la ses con menos desarrollo de las mismas, tanto
situación de un numero pequeño pero importan- de antigua como de nueva incorporación.
te de personas concretas, que han visto signifi- Reflexiones que retoman una reciente publica-
cativamente aumentadas sus perspectivas de ción de CEFEC (“The Linz Appeal”) (57), en la
ciudadanía y recuperación personal. medida en que sus recomendaciones coinciden
básicamente con las nuestras (31).
Pero también la experiencia de estos años per-
mite ver que todavía queda mucho por hacer En ese sentido, los programas de apoyo al
para llegar a un porcentaje creciente del colecti- empleo de este colectivo, si quieren ser efectivos
vo. Para ello intentamos trabajar especialmente para un número significativo de personas, deben
en varias líneas: tener en cuenta:
1. La de mejorar la coordinación con los servi-
1. La necesidad de articularse con el conjun-
cios de salud mental, para que sus profe-
to de la atención sanitaria y social, que
sionales incorporen a la rutina asistencial la
debe a su vez centrarse en la recuperación
necesidad de evaluar, estimular y apoyar a
y búsqueda de la inclusión social y la plena
sus pacientes en el área del empleo, inclu-
ciudadanía de dichas personas y no en su
yendo la conservación del puesto de traba-
cuidado meramente paliativo.
jo de aquellos que lo tienen.
2. La necesidad de articular políticas y progra-
2. La de impulsar a su vez la coordinación con
mas generales con otros específicamente
las políticas y servicios generales de
adaptados a las especificidades del colectivo.
empleo, para que den cabida a personas
con este tipo de problemas, reservando las 3. La necesidad de contar con equipos profe-
intervenciones y servicios especializados sionales especializados en la orientación,
para aquellos casos de mayor complejidad. la rehabilitación vocacional y el apoyo al
empleo.
3. La de mejorar también la actuación de nues-
tros SOAE, para aumentar la calidad de su 4. La utilidad de las empresas sociales como
atención, con énfasis en la corrección de una vía importante de acceso al empleo,
dos problemas no resueltos: el de las muje- siempre que se apoye su desarrollo mediante
res y el de la población de ciudades peque- medidas legislativas, financieras y de apoyo
ñas y zonas rurales. En esta dirección acaba técnico especialmente en sus fases iniciales.
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5. Pero también la necesidad de coordinar esa La tarea no es fácil y la prueba es la insuficiencia
vía con la del empleo en empresas genera- de estos programas y de sus resultados reales,
les, siempre que se cuente con equipos en términos de tasas de empleo de este colecti-
específicos para el seguimiento y el apoyo vo, incluso en países con mayores niveles de
de larga duración. desarrollo general y de políticas de salud mental.
Pero pensamos que es necesaria y posible, a la
Y por último, la necesidad de seguir incidien- luz de los conocimientos teóricos y técnicos acu-
do, utilizando los resultados de empresas y mulados así como de pequeñas y no tan peque-
programas exitosos, en la modificación de acti- ñas experiencias desarrolladas en estos años.
tudes sociales, para lo que es esencial una Tarea, en todo caso, ilusionante y en la que espe-
buena política de comunicación e interacción ramos seguir encontrándonos con distintos pro-
social, así como de evaluación sistemática e fesionales, grupos e instituciones interesados en
investigación sobre la efectividad de los distin- el tema, intercambiando información y sumando
tos programas. experiencia y apoyo recíproco.
Correspondencia:
Marcelino López
Fundación Pública Andaluza para la Integración Social de Personas con Enfermedad Mental (FAISEM)
Avenida de las Ciencias, 27. Acc. A •41020 Sevilla. España
Tfno.: 0034 955 007 500 •Fax: [phone]
correo electrónico: [email protected]
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